Autónomos pasan su tarjeta de crédito por el TPV para poder pagar la cuota

Es una realidad que ha destapado Lorenzo Amor, el presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), quien también es vicepresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). Muchos trabajadores por cuenta propia se ven obligados a realizar pagos con su propia tarjeta de crédito en los terminales punto de venta, las máquinas de cobro electrónico de sus actividades empresariales, para así alcanzar a costear la cuota de autónomos. Es otra de las crudezas que está dejando a la vista la crisis económica producida por la propagación del coronavirus COVID-19.

Ante la obligación del Gobierno socialista de Pedro Sánchez de correr con los gastos del abono mensual a la Seguridad Social, los autónomos precisan de liquidez en sus cuentas bancarias. Sin embargo, la mayoría de ellos no está teniendo ingresos en estas fechas ante la paralización de la economía por el estado de alarma decretado en el país. De esta manera, Lorenzo Amor explica en una entrevista concedida al diario El Mundo que "España se ha quedado a la cola de protección de los autónomos en el ámbito del coronavirus, basta con ver las medidas que han adoptado países como el Reino Unido, Portugal, Italia, Francia o Dinamarca". Amor no pide no pagar la cuota, sino "que se suspenda ya que en estos momentos no hay liquidez, y no vamos a ir a los bancos a endeudarnos".

"El Gobierno es tan cicatero que va a cobrarles a todos los autónomos la cuota y devolverá, a los que han perdido el 75% de su negocio o se han visto obligados a cerrar, solamente la parte de cuota que va del 14 al 31 de marzo", denuncia además el representante andaluz de los autónomos en España. "El Gobierno no ha entendido que los autónomos tienen que seguir pagando un montón de gastos y el cajón está cerrado [...] y los infectados por coronavirus van a tener una prestación de sólo 425 euros", añade.

Es decir, que el autónomo infectado por coronavirus cobraría desde el primer día el 75% de la base, si bien esta base, en la inmensa mayoría de los casos, es de 944 euros, y el 75% son en torno a 700 euros. Sin embargo, ese autónomo está obligado a seguir cotizando a la Seguridad Social. "Estas son las paradojas de cuando no se escucha a los autónomos", concluye Lorenzo Amor.

En ATA se encuentran estos días asesoran de forma gratuita a los trabajadores autónomos a través de su página web (ata.es) y del teléfono 900-101-816 ante cualquier duda sobre sus negocios y obligaciones fiscales que puedan tener.