El primer espectáculo de flamenco en el Metaverso fue ‘made in’ Andalucía

El concepto de “Metaverso” no queda tan lejano como muchas personas creen. La realidad es que en todas partes se habla de ello y no tardaremos mucho en ver a la gran parte de la población hacer uso de todas las posibilidades que estos mundos paralelos ofrecen. 

Y de eso trata el artículo de hoy, de las posibilidades del Metaverso y de una en concreto, que se descubrió este año en nuestro país gracias a un artista andaluz. Estamos hablando de David Morales, un bailaor gaditano que apuesta por la innovación y que no duda en utilizar estos mundos digitales como altavoz para promover un género musical tan propio de nuestra tierra como es el flamenco.

Quedó demostrado gracias a este evento que se retransmitió de manera simultánea en Ginebra, Nueva York, Miami, Madrid y La Línea de la Concepción (lugar de origen del artista), que realizar un espectáculo de flamenco es posible no solo encima de un tablao, sino también dentro del mundo de los NFT.

Aunque los espectáculos no son lo único que se ve en el Metaverso. En la actualidad, dentro de los metaversos más importantes y avanzados a nivel técnico y popular, ya se pueden encontrar muchos sectores.

Por ejemplo, en Decentraland (uno de los más populares), se encuentra la primera discoteca virtual, que es una adaptación de Amnesia en Ibiza, y en este mismo metaverso hay ya casinos que cuentan con un nivel de reconocimiento importante, en los que es posible participar en mesas con jugadores de todo el mundo y utilizar las tragamonedas para conseguir NFT.

De hecho, algunos de los mejores casinos online de España ya están dentro del metaverso o están pensando en incluir esta acción en su estrategia, por lo que es cuestión de tiempo (muy poco tiempo), que estos mundos virtuales nos brinden todas las posibilidades que actualmente tenemos en Internet, pero proporcionándonos una experiencia mucho más inmersiva y sin límites.

Otra opción del metaverso es poder encontrar tiendas en las que poder adquirir todo tipo de objetos 3D o ‘wearables’ para personalizar los avatares. Es el caso de Nikeland, un espacio en Roblox con el que cuenta la marca Nike, o de Silbon, una marca andaluza de ropa de caballero que tuvo su entrada en el metaverso este verano.

Sí que es cierto que el sector de la moda es el más avanzado en estos mundos paralelos, puesto que incluso en metaversos como Decentraland se han recreado eventos como la “Metaverse Fashion Week”, pero esto no quiere decir que sea el único ni el último.

Otro ejemplo es el turismo andaluz, que también tiene cabida entre píxeles. Una réplica de La Alhambra de Granada se construyó en un metaverso, y hubo un comprador que se hizo con todos sus terrenos digitales. Por lo tanto, aquí no hablamos solo del sector del turismo, sino también del sector inmobiliario.

Queda claro que este nuevo mundo virtual no para de crecer y de abarcar cada vez más sectores dentro de él. Los espectáculos como el que realizó David Morales no han sido los primeros en llegar, por supuesto, aunque sí supusieron un avance, sobre todo para promover por todo el mundo géneros artísticos tan importantes para nuestro país como el flamenco. De hecho, el flamenco se considera Patrimonio de la Humanidad desde 2010, pero eso es otra historia.

No cabe duda de que esta es una oportunidad maravillosa para que artistas españoles se proyecten en otras partes del mundo. David Morales ya tiene experiencia cruzando charcos, ya que ha celebrado giras incluso en Colombia, pero el poder de estar en distintos lugares del mundo a la vez, dio al artista un plus de reconocimiento y popularidad.

No es que el futuro esté cada vez más cerca. Es que ya hemos desdibujado esa niebla que no nos dejaba ver con claridad qué era eso de los “metaversos”. Estamos ya sumidos por completo en esta tecnología, solo falta que los desarrolladores vayan investigando y creando nuevas oportunidades dentro de estos mundos digitales y que las empresas peguen el salto y ofrezcan sus productos y servicios también por medio de esta vía tan apasionante.