Jucil denuncia el desamparo de la Guardia Civil después de que un agente haya sido herido en una actuación

La Policía Local de Chipiona y la Guardia Civil, en una operación conjunta, detuvieron este pasado sábado a un individuo que amenazaba a propietarios y clientes de un establecimiento con un cuchillo de grandes dimensiones bajo un estado de gran nerviosismo y agresividad. Tras una persecución a pie y un forcejeo, la actuación finalizó con el arresto del delincuente en otro inmueble, no sin antes mostrar una fuerte oposición a ello, debiendo aplicarse ambas patrullas y resultando lesionado de gravedad en una pierna uno de los guardias civiles. Unos hechos que han sido denunciados por la asociación JUCIL.

Durante la inmovilización del agresor el agente sufrió rotura de rótula. Debido a esta lesión sufrida, el miembro del benemérito cuerpo permanecerá mas de seis meses de baja para el servicio y una larga y delicada recuperación.

La pena impuesta por la autoridad judicial que ha instruido el caso ha dejado al agresor en libertad con cargos y ha establecido una orden de alejamiento de 200 metros hacia las personas que amenazó con el cuchillo. Cabe destacar que durante la detención el agresor no paraba de repetir que quería "volver a la cárcel", por lo que sería probable que volviese a delinquir próximamente para conseguir su objetivo, la privación de libertad.

"¿Tan barato sale agredir a un agente de la autoridad? ¿Hasta cuándo vamos a tener que soportar la impunidad de la Justicia? ¿Qué más tiene que pasar para que una autoridad judicial decrete prisión preventiva? Vivimos en unos tiempo difíciles donde los delincuentes salen airosos de sus fechorías gracias a una Justicia edulcorada que no protege a quienes nos protege", manifiestan desde JUCIL.