La FLAMPA exige garantías de salubridad a la Consejería de Educación de cara a la vuelta a las aulas

La Federación Local de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FLAMPA) de colegios públicos de Jerez ha manifestado su total disconformidad con la actuación de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía ante el comienzo del nuevo curso, para el que están previstas las clases presenciales. Desde la entidad consideran que la Administración autonómica elude responsabilidades, por lo que exigen garantías en materia de salubridad frente a los contagios por coronavirus.

En la FLAMPA ven necesaria la puesta en marcha de una serie de medidas y el establecimiento de un protocolo claro de actuación ante eventuales escenarios que pudieran producirse. Entre estas reivindicaciones está la coordinación con el centro de salud de la zona, de modo que se cree una figura de sanitario de referencia en comunicación con el centro de enseñanza. Además, para una vuelta segura a las aulas, en la FLAMPA creen que se hace imprescindible una bajada de la ratio de alumnos por clase, considerando que en la actualidad están "masificadas", por lo que no se hace posible guardar la distancia de seguridad.

A su vez, la federación pide un aumento del personal docente para mantener las líneas en la escuela pública, así como de los equipos encargados de la limpieza en los colegios ya que la Junta de Andalucía tiene por objetivo que se lleven a cabo dos desinfecciones diarias en los mismos. También solicitan a la Consejería de Educación que dirige Javier Imbroda que se permita la flexibilización horaria de los centros para evitar aglomeraciones.

La brecha salarial es otra de las preocupaciones de la FLAMPA y que durante el confinamiento decretado por el estado de alarma supuso un gran inconveniente para numerosas familias, en las que veían cómo sus hijos no disponían de los medios tecnológicos suficientes para recibir una enseñanza efectiva a distancia. En este sentido, cabe decir que la Junta de Andalucía anunció el pasado mes de julio una inversión de 45 millones de euros para la compra de ordenadores portátiles en los centros educativos de la comunidad.

Otras de las propuestas de la FLAMPA pasan por establecer seguimientos a los alumnos vulnerables sujetos a los planes de garantía alimentaria, así como llevar a cabo mejoras de accesibilidad en los colegios y de atención a niños con necesidades especiales. De no cumplirse estas actuaciones, desde la federación avanzan que "nuestros hijos e hijas no asistirán a clase", considerando que "nadie puede amenazarnos ni decir qué tenemos que hacer con ellos sin dar unas soluciones adecuadas a estos momentos tan difíciles que atravesamos".