La realidad virtual está de moda también en publicidad

Quien crea que la publicidad se limita únicamente a anuncios debería saber que, aunque la televisión siga siendo la reina en cuanto a inversión publicitaria se refiere, la cantidad invertida en publicidad para medios no convencionales (que van desde actos de patrocinio hasta marketing móvil) supera desde hace años la cifra que se destina al conjunto de medios clásicos como la prensa escrita o la radio. De hecho, las grandes marcas han estado siempre interesadas por las tecnologías emergentes (y más aún las agencias de publicidad, con tal de presentar algo diferente para ganar premios en festivales). Cuando se empezó a popularizar internet rara era la campaña de publicidad que no tenía una página web propia, y más reciente tenemos el caso del “boom” de las apps para dispositivos móviles. Desde el pasado 2015 está pegando fuerte una tecnología que en tiempos pasados no era más que un intento de entretenimiento futurista fallido, pero que ahora está creando una industria a su alrededor que mueve miles de millones de euros: la realidad virtual.

Para que nos hagamos una idea del interés que está suscitando la realidad virtual, solo hay que hacer una rápido resumen de las gafas que hay en el mercado que utilizan esta tecnología y las que van a lanzar en un futuro cercano. De momento se encuentran a la venta para el público general las Samsung Gear (compatible solo con algunos móviles Samsung), las HTC Vive (unas gafas que adaptan la experiencia a la habitación en la que nos encontramos) y las conocidas Oculus Rift (las “culpables” de que se haya desatado de nuevo el interés por esta tecnología). A estas tres, en octubre se sumarán las Playstation VR, la apuesta de Playstation para llevar la realidad virtual a su Playstatión 4, y próximamente las LG 360 VR para el smartphone LG G5. Cada una de estas gafas están dirigidas a diferentes públicos y tienen o tendrán un precio de salida bastante elevado (y además necesitarán ordenadores o móviles con la suficiente potencia para hacerlas funcionar), pero existe la posibilidad de conseguir unas gafas de cartón con lentes desde tres o cuatro euros y colocar en ellas el teléfono móvil para disfrutar de esta tecnología, e incluso desde unos 20 o 30 euros tener la posibilidad de adquirir dispositivos de plástico donde colocar tu móvil.

Dentro del mundo de la publicidad el uso que se le puede dar a la realidad virtual es variado. Podemos encontrar desde anuncios en 360º como un viaje por un mundo de leche y galletas para Oreo, ser protagonistas de cortos en primera persona patrocinados por Mini, poder ver los destinos a los que puedes viajar antes de comprarlos como hace la aerolínea Virgin Airlines y hasta convertir el propio producto en unas gafas de cartón como el Happy Meal de McDonalds en Suecia.

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En España poco a poco las agencias se van animando a contar en ofrecer servicios de realidad virtual, como es el caso de Havas Worldwide, que al firmar un acuerdo de exclusividad con New Horizons VR se convirtió en la primera agencia de publicidad española en dedicar un departamento de innovación con capacidad de ofrecer servicios de realidad virtual a sus clientes, como el Banco Santander.  Por su parte, los fundadores de las agencias Doubleyou y Wysigyg y la empresa de recomendación de Apps móviles The App Date han creado “The VRain”, la primera incubadora española dedicada al desarrollo de productos y proyectos de realidad virtual. Como carta de presentación de esta incubadora presentaron un canal de noticias e historias llamado VReak preparadas para esta tecnología.

Y si la agencia no cuenta con la colaboración permanente de una empresa que cuente con la capacidad de desarrollar experiencias virtuales siempre puede recurrir a especialistas externos. La compañía catalana de servicios digitales Visyon ha participado en campañas para marcas como Samsung o Royal Caribbean, la empresa madrileña Future Lighthouse tienen como reciente logro ser pioneros en llevar a cabo el primer capítulo en realidad virtual para una serie de ficción como El Ministerio del Tiempo, y la productora Zissou creó junto a la agencia RMG Connect una campaña adaptada a las gafas Oculus para Mercedes-Benz.

Todavía es temprano para saber si esta tecnología logrará tener el éxito masivo que se espera. Quizá el alto precio de los dispositivos sea el tema que menos debería preocupar a las empresas que están apostando por la realidad virtual, pues es bien sabido que toda tecnología emergente suele salir al mercado con precios prohibitivos que se van regulando conforme tiene una mayor aceptación entre los usuarios. El cansancio que pueda suponer llevar las gafas durante mucho tiempo, la falta de aplicaciones que mantengan al usuario constantemente interesado o la llegada de otras tecnologías como la realidad aumentada (que a diferencia de la virtual combina elementos reales con virtuales) podrían ser obstáculos que podrían influir en la reacción y accesibilidad del gran público a la realidad virtual. Poco a poco veremos si se trata de una revolución que viene para quedarse o una moda pasajera como en los años 80 y 90.