¿Qué sistema de plantación para el olivar es el más usado en la actualidad?

La alta demanda de olivar en los últimos años ha llevado a muchos agricultores a usar este tratamiento intensivo, debido a las numerosas ventajas que ofrece en cuanto a la rentabilidad de este cultivo, consiguiendo así una gran producción para satisfacer la demanda.

Ventajas del sistema intensivo

El sistema de plantacion olivar superintensivo usado para las zonas de Cádiz, Huelva, Sevilla y el resto de Andalucía tiene una característica principal que lo diferencia de otros sistemas y es la disposición en seto. 

Por lo general, se emplea en marcos de plantación, con un espacio entre calles de unos tres a cuatro metros, y entre los olivos, de 1 y 1,5 metros. Gracias a esto se puede conseguir una gran densidad por cada superficie, sobrepasando los 1.500 pies o hasta más.

La distancia establecida entre cada una de las líneas es para que se pueda acceder con la máquina de poda y recolección, mientras que la distancia entre las plantas dependerá de la variedad escogida así como su porte.

Por medio de este sistema, la producción en cantidad se dará tras el segundo o tercer año, superando los 12.000 kg/ha, al poco tiempo de ser implantado.

Una de las ventajas más destacadas de este sistema es esto, la producción obtenida en solo pocos años de ser plantado, lo cual permite una amortización de la inversión de una forma más rápida.

Además, la mano de obra se reduce mucho, dado que gran parte de las tareas que suelen realizarse dentro de este cultivo lo hacen maquinarias agrícolas. Ya sea para recolectar o podar el cultivo, así como todo tipo de tratamiento, se usan máquinas automatizadas.

Respecto al capital humano puede ser un poco desventajoso, sin embargo, debido a que el coste del mantenimiento del cultivo es más elevado y el precio del aceite no siempre cubre todos los gastos, es una garantía de éxito en producción.

Consideraciones del cultivo

Orientación

Debes tener en cuenta algunos aspectos en el momento de cultivar el olivar por medio de este sistema, y el principal de ellos, son los parámetros de plantación.

Si los marcos de plantación son bastante elevados, hay riesgos de que sobre, así como para conseguir un buen rendimiento por cada aceituna, lo cual puedes corregir analizando la orientación de las parcelas, siendo la más recomendada la orientación Norte-Sur.

Escoger la variedad

Otro aspecto a considerar es escoger la variedad, dado que esto te garantizará el éxito del cultivo. 

Es más común conseguir variedades que se adapten a la perfección a los requerimientos de este sistema de cultivo, tanto en su brotación, en la formación del ramaje, la facilidad para recolectarla, así como la disposición de sus raíces.

Entre las variedades que existen puedes encontrar las siguientes:

Arbosana

Sobresale por poseer un vigor menor en comparación con otras variedades, por lo que se pueden incrementar los marcos de plantación. Su rendimiento graso producido es excelente, además, el sabor del aceite es intenso.

Arbequina

Puedes conseguir también variedad de arbequina, que se puede adaptar sin problemas a marcos de plantación disminuidos.

Como es el caso de la arbequina As-1, lo que permite un eje de poda bastante marcado, disminuir la vecería y conseguir de forma más rápida la entrada en producción. No obstante, su producción en rendimiento graso es mucho menor que la antes mencionada.

Manzanilla

De igual manera, la manzanilla sevillana se está adaptando a este sistema, por lo que se pueden conseguir numerosas plantaciones con una implementación muy reciente.

Koroneiki

Esta variedad procedente de Grecia logró adaptarse también a este sistema de plantaciones. 

Sin embargo, presenta más problemas en cuanto a la adaptación de la producción de marcos reducidos, dado que su brote no se da por medio de un eje central marcado. Su resistencia al frío es muy baja, por lo que si tienes una parcela de interior sombreada, esta variedad no te servirá.

Este sistema de plantación arroja numerosos beneficios, como la alta producción en poco tiempo o la reducción de mano de obra, además de que es posible conseguir diferentes variedades, cada una con sus propias características destacables, lo que permitirá satisfacer la alta demanda de las mismas en el mercado.