Un buitre leonado podrá comer gracias a un implante de pico

Implantarle un pico a un buitre leonado que tenía una malformación. Ese ha sido el último trabajo del implantólogo dental Francisco Rábago y los veterinarios del Zoológico de Jerez, Miguel Quevedo y José María, e Íñigo Sánchez, biólogo restaurado. La cría, nacida este año en libertad, tenía una atrofia en la parte superior del pico y dependía de sus cuidadores para poder comer. Ahora, con esta operación, podrá hacerlo por sí misma.

“Lo que hemos hecho ha sido amputarle el pequeño muñón que tenía y le hemos colocado un tornillo, de los que utilizamos en la cirugía maxilofacial para sustituir los dientes, entre los dos ojos, encima del pico, metido en el cráneo. Sobre eso, con dos aletas laterales sujetadas por dos hilos, le hemos colocado un pico para que pueda valerse por sí solo. Es cierto que este animal nunca podrá estar en libertad, puesto que con esa malformación es imposible, pero por lo menos será autosuficiente”, destaca Francisco Rábago de una intervención de unos 20 minutos de duración que ha sido todo un éxito.

Por el momento, el buitre continúa aislado, pero conforme se vaya viendo la evolución se le podrá incorporar con sus compañeros, afirma Rábago, director clínico del Instituto de Odontología y Cirugía Oral Rbg y especialista en cirugía oral, periodoncia, implantología y rehabilitación oral maxilofacial.

La mayor de las dificultades se da, según el doctor jerezano, porque “el hueso del ave no es denso como el nuestro, sino que es hueco para que no pese y pueda volar”. “Para mí lo que estamos haciendo ahora es lo más complicado”, afirma Rábago.

Y habla de lo más complicado porque no es lo único. Lo último fue la implantación de una pata a un ibis eremita, especie en peligro de extinción, que ya está volando. Era la primera vez que se hacía y fue todo un éxito.

Hablando de futuro, Rábago y el equipo del Zoológico de Jerez tienen ante sí la reimplantación de otro pico y de un ala a un ave. “Todo lo que podamos hacer, lo vamos a hacer”, insiste Rábago.

No obstante, el futuro tiene que esperar y todo sería más fácil con financiación. Intentan apoyarse en la empresa privada y, esperan que de una vez por todas, el Ayuntamiento de Jerez también lo haga.

A pesar de todo, llevan más de un lustro haciendo este tipo de operaciones. Rábago destaca: “Llevamos siete años con implantología y cirugía oral. Hace pocos estirpamos un tumor a un mono”.

Pero con los mamíferos todo es relativamente más fácil, por el hecho de que “es muy parecida la fisiología y la anatomía a la del ser humano” y están más acostumbrados.

Cabe resaltar que este nuevo hito ha llegado hasta la capital de España. Jesús Sánchez, entrenador de aves rapaces del Zoológico de Madrid, acogía con agrado la noticia de la reposición de este pico: “Me parece muy bien. Es sorprendente. Es difícil. Depende de la zona y donde meten la base del implante, todo conlleva una dificultad. Esto es bueno para nuestro gremio y para los centros de recuperación; habrá que seguir este método”.